¿Qué es el CBD?
El cannabidiol (CBD) es un compuesto químico que se encuentra en la planta Cannabis sativa. A diferencia del tetrahidrocannabinol (THC), otro cannabinoide presente en la misma planta, el CBD no produce efectos psicoactivos. Esto significa que su uso no está asociado con los efectos recreativos que comúnmente se relaciona con el consumo de marihuana.
La investigación sobre el CBD ha crecido significativamente en la última década, y numerosos estudios han explorado sus posibles beneficios para la salud. Según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el CBD ha demostrado ser eficaz en la reducción del dolor, la inflamación y la ansiedad. Estos efectos son particularmente relevantes en el contexto de trastornos como la artritis, la esclerosis múltiple y otros problemas de salud crónicos.

El CBD ha mostrado evidencia científica sólida en el tratamiento de varias enfermedades y trastornos, especialmente en aquellos relacionados con convulsiones, ansiedad, dolor crónico y algunos trastornos neurodegenerativos como el manejo de formas raras de epilepsia, el síndrome de Dravet y el síndrome de Lennox-Gastaut. Además, estudios y algunos ensayos clínicos sugieren que el CBD puede ser efectivo para disminuir síntomas de ansiedad, aliviar ciertos tipos de dolor, y potencialmente brindar protección neurodegenerativa en trastornos como Parkinson.

Ansiedad
La ansiedad es una respuesta emocional normal ante situaciones de estrés , que en exceso puede convertirse en un trastorno que afecte la salud mental y física. La prevalencia mundial de los trastornos de ansiedad es aproximadamente del 7-10%, siendo uno de los problemas de salud mental más comunes. La ansiedad puede causar síntomas como preocupaciones excesivas, miedo, irritabilidad, problemas para dormir y dificultad para concentrarse, lo que a su vez impacta negativamente en las relaciones sociales, el rendimiento laboral y la calidad de vida en general, dificultando las actividades diarias y generando un estado de malestar constante.

Insomnio
El insomnio y los trastornos del sueño son condiciones en las que una persona tiene dificultades para conciliar el sueño, mantenerse dormido o descansar lo suficiente, lo que provoca un sueño de mala calidad. Estos trastornos son muy comunes en todo el mundo; se estima que afectan aproximadamente al 10-30% de la población global, siendo más frecuentes en adultos y en personas con altos niveles de estrés o ansiedad. La falta de sueño adecuado genera fatiga, dificultad para concentrarse, reducción en el rendimiento laboral o académico, irritabilidad, problemas de memoria y un aumento del riesgo de enfermedades físicas como hipertensión y Diabetes.

Dolor Crónico
El dolor es una sensación desagradable que indica la presencia de un posible daño en el cuerpo. Cuando el dolor persiste durante más de tres meses, se considera dolor crónico, que puede ser causado por diversas enfermedades, como artritis, fibromialgia, ciática, lesiones nerviosas, entre otras. El dolor crónico afecta profundamente la calidad de vida de quienes lo padecen, causando fatiga, dificultades para realizar actividades cotidianas, problemas de sueño, alteraciones emocionales como ansiedad y depresión, y limitaciones sociales y laborales.

Transtornos neurologicos y enfermedades Neurodegenerativas
La epilepsia es un trastorno neurológico caracterizado por la aparición recurrente de convulsiones, que son episodios breves de actividad eléctrica anormal en el cerebro. La epilepsia puede afectar a personas de todas las edades.
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa que afecta principalmente el movimiento. Sus síntomas principales incluyen temblores en reposo, rigidez muscular, lentitud de movimientos y alteraciones en el equilibrio y la coordinación. Es una enfermedad que generalmente afecta a personas mayores.